La fragancia aromática del gel de ducha Manhattan es fresca y revitalizante. Las notas de ciprés, lavanda y papiro son acordes masculinos que aportan un aroma duradero y agradable al cuerpo, una sensación de frescura con notas vigorizantes.
Esta fragancia es fruto del recuerdo de un paseo por Manhattan en primavera. Una tormenta estalla en el Upper East Side y deja tras de sí un sol radiante. El asfalto se calienta y emana un olor metálico muy particular. El viento corre entre los rascacielos y esparce el frescor vegetal de la naturaleza cambiante que alberga el corazón de Central Park. El paseo llega a su fin en el Museo Metropolitano, donde se respira un olor eterno a papiro arrugado.
Se recomienda utilizarlo una o dos veces al día, haciendo espuma por todo el cuerpo en la ducha y después aclarando abundantemente con agua limpia. Este gel de ducha aporta una sensación de frescor y limpia e hidrata la piel con suavidad.
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